viernes, 11 de septiembre de 2009





Siempre he descrito mi vida como una noria dando vueltas.Tengo días en los que estoy arriba, tan arriba que incluso puedo tocar el cielo pero en otros me encuentro a ras del suelo pidiendo a gritos al feriante que ponga en marcha la atracción. Pero creo que de tanto gritarle, el feriante se ha quedado sordo. Ahora solo me queda esperar a que la atracción este hasta arriba para volver a subir.

2 comentarios:

El perrito que reía dijo...

No te preocupes todos tenemos complejo de noria :P.

Besetes.

Ilsayid dijo...

breve y precisa forma de expresar como nos encontramos tantas veces...Un regalo el haber encontrado cositas como las que escribes