sábado, 11 de agosto de 2007



Anoche fue una noche descolocante. Todo empezó y acabó siendo cojonudo pero lo intermedio me come la cabeza.
Oí su voz, si la oí. En ese momento mil cosas pasaron por mi mente, eran tanto sentimientos juntos que no sabría explicarlo. Le echaba de menos sí, pero escuchar su voz sonando a través de un móvil tras mucho tiempo sin saber de él... uf!
Lo que hubiera dado por poder decirle algo, aunque fueran simplemente dos palabras, un sencillamente: que tal?
A esto le siguió una noche increíble que se resume con amigos,risas y de fiesta! ; os preguntareis: ¿Qué más se puede pedir? no? pero yo ayer si que hubiera pedido más. Hubiera pedido tenerle entre mis brazos, decirle lo mucho que me importa al oído y poder disfrutar cada uno de esos momentos especiales a su lado. Pero la vida sigue portándose cruelmente conmigo y yo le doy la espalda.
Hoy más que nunca se la voy a dar. Hoy tengo el día egoísta. Ese día en el que no me importa lo que se cueza en la vida de los demás y en el cual solo quiero ocuparlo en pensar en mi, en mi y después en mi.
Voy a tomar el sol, voy a leer, voy a escuchar música, voy a apegarme a mi familia que estos días los tengo abandonados, voy a relajarme, no voy a pensar en nada, no voy a pensar en él, no voy a pensar ni en quien soy ni que pinto aquí.





Hoy por mí, le pueden dar por culo a el 99% del mundo.



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